Foto: Álvaro García Fuentes
Es el otro calvo de la lotería de la risa. Un premio Goyo al humorismo ilustrado para este experto en asuntos americanos. Trump y su mundo como ingredientes para la reflexión made in Spain. Derecho como el Tío de la Vara. En la cárcel entendió que su universo era apresar a los ciudadanos libres con sentido del humor. Vive de la España cainita, aflojando el paquete de angustia que nos genera tomarnos tan en serio. El apasionado de la divulgación científica que puso en Órbita Laika a Pedro Duque tiene un amigo ministro. Ahora hace de Jordi Hurtado en Código Final. Da culto a la improvisación mil veces pensada. Cultureta ajeno a los cultismos. Cómico para el vulgo, y valga la redundancia. Le encantaría vivir en el universo de Faemino y Cansado, y ama a José Mota. Ni campanadas, ni Goyas: “No tengo necesidad de que me crucifiquen”. Hace humor por caridad fina, y cuenta con el Guinness de ser cómico durante más de 30 años sin rastros de cinismo.
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