
Una vida intensa tatuada a versos. Metáforas, paradojas, símiles y paralelismos bailan en su boca el rock and roll. Aquellos gramos de más son hoy kilos de ganas de vivir cantando. Fue Platero y Tú, y detrás de este porte de cuero negro hay un cantante, se diría, todo de algodón. Bandera blanca de paz sobre un esqueleto que nunca se rinde. Guitarrero compulsivo. Poeta con fórceps. Padre de tres y de toda una Generación Fito sin censuras de edades, credos, ideas, fronteras, dress code y códigos postales. Autorretratista, realista, impresionista y sabinero. Corazones con alas en el brazo, sonrisa profunda, cruz de plata en torno al cuello, boina crónica, perilla arraigada, gafas de coser estribillos. Ojillos transparentes, más aquarius que “del color de la cocacola”. Honesta banda sonora, en estéreo desde 1991. Un soldadito marinero huyendo consigo de sí. Acaba de parir Cada vez cadáver bajo un cielo hermético y las palabras le arden, como siempre. Por la boca vive el rey.
Lee la entrevista en Confidencial Digital
